María Almudéver en Caixa Popular a Escena

En tanto que sigamos remando, sigamos creando y creyendo en el teatro hay futuro

Dice la RAE, en su primera acepción de la palabra, que invisible es algo "que no puede ser visto". Pero qué algo no pueda ser visto no significa que no esté ahí, no solo que no esté ahí sí no que en ocasiones sin ello todo puede desmoronarse. La situación actual nos ha demostrado cómo profesionales casi "invisibles" como cajeros, reponedores, transportistas, personal sanitario y de limpieza, y otros muchos, son los que conforman esa red invisible que hace que durante estas duras semanas todos podamos continuar. Trasladando un símil muy utilizado en el mundo del mar al teatro, podríamos decir que una producción teatral es como un iceberg, en el que los espectadores y espectadoras solo vemos la punta de todo (lo visible), pero los cimientos que hacen que no se tambalee ese todo están sumergidos en la parte escondida (lo invisible).

Desde Caixa Popular y el Teatro Olympia queremos, en esta sección del blog, poner en valor, dar a conocer y visibilizar todas estas profesiones y profesionales, oficios, y por qué no llamarlo arte, que están detrás de cada montaje o producción teatral, que quedan fuera de los focos, del calor del público, del reconocimiento, pero que son imprescindibles, esenciales y vitales para subir el telón cada día.

En esta quinta entrega tenemos el placer de contar con la vestuarista María Almudéver;

1. ¿Quién es María Almudéver? 

Soy una mujer de 43 años, actriz, vestuarista, malabarista de la vida, apasionada hasta le médula de mi profesión. Empecé con 21 de la mano de Albena en la sala Escalante, he trabajado en series locales y nacionales, películas, programas de televisión, pero mi novio es el teatro, nada me sube la adrenalina como subirme a un escenario.

2. ¿Qué hace una vestuarista?

Primero que nada leerse el texto para luego hablar con el director y empezar con las propuestas y el diseño que luego se llevará a cabo.

Es una de esas profesiones "invisibles", a veces me da la impresión de que el público en general no se da cuenta del vestuario si no es algo de época o muy espectacular, pero te aseguro que detrás de cualquier diseño, aunque sea un vaquero y una camiseta hay un porqué, no es cualquier prenda la que se elige, hay texturas y colores que hablan y cuentan cosas sobre los personajes. Ser actriz me ayuda mucho en eso, intento aportar mi granito de arena en la construcción de ese "ser humano", (porque los personajes, al fin y al cabo son personas), que nos va a contar una historia, nos va a llevar de viaje.

 Además de con el director, siempre trabajo con la actriz o actor, me preocupa mucho que se sientan cómodos, que lo puedan defender, que no se sientan "disfrazados", y por supuesto, si no les funciona, buscar otra propuesta o solución, al fin y al cabo es SU personaje y creo, que parte de mi trabajo, también consiste en darles seguridad.

El diseño de vestuario una de esas profesiones "invisibles", a veces me da la impresión de que el público en general no se da cuenta del vestuario pero detrás de cualquier diseño, aunque sea un vaquero y una camiseta hay un porqué, no es cualquier prenda la que se elige, hay texturas y colores que hablan y cuentan cosas sobre los personajes.

3.  ¿Por qué te enfocaste al diseño de vestuario?

 Llegué por casualidad y necesidad, y se ha convertido en mi "otra profesión"

4. ¿Dónde comenzaste?

Empecé cuando tenía la compañía Krisis Teatro-Danza, junto con Cristina Fernández y Yessica Pons, hacíamos los espectáculos con muy poco dinero, así que todas hacíamos de todo, y me tocó vestuario, ni siquiera me lo había planteado, fueron mis compañeras las que vieron ese potencial en mí, pensaron que yo era la que más "gracia" tenía y que lo podría hacer. Después empezaron a llamarme otras compañías y hasta hoy.

5. ¿Qué te ha dado el teatro? Y, ¿qué te ha quitado?

Me ha dado muchas vidas, todavía me las da, y lo que le queda, espero? Me ha dado amistades, viajes físicos y emocionales lejanos y profundos, fuerza, determinación, tesón, felicidad absoluta.  Me ha dado una profesión, una manera de entender el mundo y vivirlo, un cambio constante, inconformismo, consciencia como ser individual y colectivo, admiración, empatía, escucha, aprendizaje infinito. Y risas, muchas risas.

Me quitado horas de sueño, el hambre y el miedo.

El teatro me ha dado una profesión, una manera de entender el mundo y vivirlo, un cambio constante, inconformismo, consciencia como ser individual y colectivo, admiración, empatía, escucha, aprendizaje infinito. Me ha dado muchas vidas, todavía me las da, y lo que le queda, espero.

6. ¿Qué es lo que más te apasiona de tu profesión?

Es difícil quedarme con una sola cosa, de mi profesión la verdad es que me gusta TODO! Cuando estoy trabajando me siento muy feliz, es cuando soy yo de verdad, cuando descubro cosas que no sabía, y eso que llevo ya un rato conmigo misma... Aunque soy actriz, llevo años desarrollando otras profesiones como diseño de vestuario o ayudante de dirección, esta última me apasiona. Pero creo que si me tuviera que quedar con algo sería con el proceso de ensayos, tanto cuando estoy arriba del escenario como cuando estoy detrás. Me fascina ver cómo se construye un espectáculo, desde el texto, las primeras reuniones, ver cómo un equipo formado por tantas personas diferentes trabaja en los distintos ámbitos para dar forma a la obra aportando todo su esfuerzo, talento y creatividad, es una cosa mágica, a veces un milagro... 

Trabajar como ayudante me ha dado una visión más global, más consciente de todo lo que genera ese proceso creativo hasta el día del estreno. He tenido la suerte de trabajar con directores que me han permitido aportar mis ideas, que han confiado en mi mirada y pedido opinión, eso ha sido muy importante, todos tenemos un potencial creativo, algo que decir, un punto de vista.

Y luego ver a mis compañeros actores darle forma a los personajes y contar la historia, eso es una cosa increíble... Reír, llorar, conmoverme, pensar, sufrir, dudar, respirar con ellos, esa parte tan íntima y humana es algo difícil de explicar. Muchas veces he llegado a casa llena de tantas cosas, tan plena, es como si me hubieran dado la vuelta como a un calcetín. Tantas veces pienso: qué bueno sería que cualquier persona pudiera venir a un proceso de ensayos y vivir todo esto.

Muchas veces he llegado a casa llena de tantas cosas, tan plena, es como si me hubieran dado la vuelta como a un calcetín. Tantas veces pienso: qué bueno sería que cualquier persona pudiera venir a un proceso de ensayos y vivir todo esto.

7. ¿Qué consejo le darías a alguien que quiere comenzar en este mundo?

No sé si soy quien para aconsejar nada... Cada cual es un mundo tan complejo... Más que un consejo es una realidad, esta es una profesión que te va a dar lo mejor y lo peor, es una noria en la que un día estás tocando el cielo y al siguiente no sabes ni cómo te llamas. Pero hay un motor, una chispa que siempre te mueve hacia delante, esta es una carrera de fondo, de obstáculos, muchas veces no se mantiene el que más corre, sino el que confía, se levanta y sabe que esta es su vida, que no sabe, ni puede ni quiere hacer otra cosa, con todo, pese a todo. 

Es un oficio difícil, pero la vida se nos ha puesto difícil, a todos, así que el rato que nos dejen estar aquí haz lo que te haga feliz, porque esa sonrisa es lo que te vas a llevar.

8. ¿Recuerdas alguna persona que haya marcado significativamente tu carrera durante estos años?

Todas las personas que he conocido me han enseñado algo, para bien o para mal, porque no nos engañemos, también hay quien te hace daño, pero afortunadamente son los menos y yo tengo la capacidad de enterrarlos rápido. 

En el tiempo que dura un montaje el equipo se convierte en tu familia, es una especie de comunión que no sé si se da en otros ámbitos.  Quizás luego no te tomes unas cervezas ni seáis los mejores amigos, pero en la escena es otra cosa, y he tenido y tengo la suerte de trabajar con gente que quiero y admiro muchísimo.

Pero si tengo que nombrar a alguien hablaré de mis AMIGOS, ellos saben quienes son, porque me levantan en los peores momentos, me aconsejan, me ayudan, me hacen crecer y me recuerdan que este es mi sitio.


9. ¿Cómo ha cambiado la profesión a lo largo de los años que llevas en ella?

La profesión ha cambiado en muchos aspectos según ha cambiado la sociedad, el mundo. Este ha sido siempre y es un oficio muy difícil, que depende en parte del dinero público, y ya sabemos cuando hay problemas quienes son los primeros en caer. Los recortes han sido constantes, así muchas compañías, teatros, salas, han cerrado disminuyendo la posibilidad de trabajar. La precariedad y el paro en nuestro sector es apabullante, y no veo que la cosa vaya a mejorar en los próximos años visto el panorama.

Hay un discurso muy peligroso que han sabido meter en el hipotálamo de una parte de la sociedad y que sacan a relucir cada vez que les conviene, para algunos somos los que vivimos de ?las paguitas", o somos millonarios por salir cinco minutos en la tele.  Hay una ignorancia brutal respecto a nuestra profesión, a la cultura en general,  inversamente proporcional a la falta de educación.

Este ha sido siempre y es un oficio muy difícil, que depende en parte del dinero público, y ya sabemos cuándo hay problemas quienes son los primeros en caer.

10. ¿Cuál ha sido el papel de la mujer en este oficio?

Pues quiero creer que el papel de la mujer ha sido, y es, el mismo que el de cualquier persona que se dedica al teatro, a la creación en todos sus ámbitos, ni más ni menos. Somos actrices, autoras, directoras, productoras, escenógrafas, vestuaristas, bailarinas, iluminadoras, técnicas, compositoras... Todos esos, y muchos más, son nuestros papeles, PROFESIONALES, punto.

11. ¿Se puede vivir (bien) de esta profesión?

Se puede vivir a ratos? Es muy difícil enlazar proyectos, cuando no te vienen todos juntos y tener que elegir, o los que caen de un día para otro, algo muy normal en estos tiempos. Yo soy actriz, también vestuarista, ayudante de dirección y lo que haga falta, pero también tuve un restaurante durante 10 años, que me dio una estabilidad, me salvó de los peores años de anterior crisis, pero también me hizo profundamente infeliz, así que me lo quité de encima y volví a mi, a mi profesión, sin saber qué  pasaría, y visto con distancia es lo mejor que pude hacer. 

12. ¿Hay futuro en el diseño de vestuario? 

Claro que sí, hay pasado, presente y futuro, hay futuro en todos los ámbitos de nuestro oficio, el vestuario es una parte más, como la escenografía, la iluminación, la música? En tanto que sigamos remando, sigamos creando y creyendo hay futuro.

Hay pasado, presente y futuro, hay futuro en todos los ámbitos de nuestro oficio, el vestuario es una parte más, como la escenografía, la iluminación, la música. En tanto que sigamos remando, sigamos creando y creyendo hay futuro.


13. ¿Dónde podemos encontrar a María Almudéver en su tiempo libre? 

Con mi familia, mis amigos, mi gente, en el monte. Hace unos meses que me he mudado a una zona de bosque, todos los días empiezan con un paseo con mi perro y un buen café con leche, recojo plantas y las pongo en mi trocito de tierra. Luego le pongo cacahuetes a las ardillas, le doy algarrobas al poni de mi vecino, miro al cielo y todo es un poquito mejor? 

14. ¿Qué le pides al futuro? 

Salud, ahora mismo eso es lo primero. Le pido que pase esta locura, poder abrazar a mis familia y amigos, comérmelos a besos. Lo demás ya me lo busco yo, y al final no es tan importante. Le pido un poco de humanidad.