Las mujeres en el patio de butacas | Teatro en Valencia

Las mujeres en el patio de butacas

Las espectadoras del Olympia hablan de teatro en el Día de la Mujer

Aunque pocas veces se escucha su voz, ellas siempre están en el patio de butacas. Escuchando, observando, riendo, emocionándose, llenándose de experiencias. 

Las estadísticas dicen que la mayoría de las personas que asisten a una obra de teatro son mujeres. Y, aunque son pocas las ocasiones en las que se pone el foco directamente sobre ellas, en el Día Internacional de la Mujer queremos darles voz para rendirles nuestro pequeño homenaje y descubrir el teatro a través de sus ojos.

En Caixa Popular a Escena entrevistamos a dos espectadoras habituales del Teatro Olympia: María Ángeles Ruíz Enguidanos y Sara Bandrés.

Háblanos un poco de ti.  

SARA BANDRÉS: Me llamo Sara Bandrés, tengo 38 años y desde hace quince años dirijo y presento 'en el Patio de Butacas', el medio cultural donde vuelco todo mi amor por el teatro y por los profesionales que se dedican a él. Una labor que compagino desde 2024 con mi primer podcast ?Esto no es una entrevista?, un programa que nació con la intención de contar las historias de esas profesionales y personas a las que admiro y poder aprender a través de sus palabras.

Desde que me mudé a Valencia, hace ya casi cuatro años, tengo la suerte de ser espectadora habitual del Teatro Olympia y del Teatre Talia, y con el paso del tiempo me doy cuenta que no es solo por su recomendable y activa cartelera teatral, sino también porque siempre siento que tras esas puertas se encuentra un lugar en donde me siento en paz y en donde sé que aman el teatro de una manera muy especial.

MARÍA ÁNGELES RUÍZ: Me llamo María Ángeles Ruíz Enguidanos, soy espectadora de teatro desde hace muchos años. De pequeña ya salía actuando en el teatro del colegio, me apasionaba, y desde entonces no he dejado de estar en contacto con el teatro. Es una pasión que me ha acompañado toda la vida.

¿Recuerdas cuándo fue la primera vez que fuiste al teatro? ¿Podrías recordar la obra?

SB:  Es uno de los momentos que más grabados tengo en mi memoria. Fue en el 2005 y de la mano de mi madre acudí al Teatro Central de Sevilla (mi ciudad), para ver la obra 'Solas' protagonizada por Lola Herrera, Natalia Dicenta y Carlos Álvarez-Nóvoa y dirigida por Jose Carlos Plaza.

Mª R: La primera vez que fui no la recuerdo, la verdad. Pero la que me atrapó hacia la interpretación fue la obra de '5 horas con Mario' hace muchos años, pues yo quería estudiar arte y ensayo pero entonces estaba mal visto, y no lo hice por mis padres. Pero esa obra me marcó.


"El teatro era mi pasión desde muy niña, y de hecho soñaba con algún día ser yo la protagonista". María Ángeles Ruiz

¿Cómo surge tu pasión por el teatro?

SB:  Nació gracias a dos mujeres, pero principalmente a mi madre. Ella ya disfrutaba con este arte y el día que me hizo el gran regalo de ir con ella a ver la obra, 'Solas' me lo contagió. Luego, hicimos nuestra la costumbre de intentar ir juntas y de manera asidua a ver las obras que visitaban Sevilla y esa tradición me marcó de por vida.

Y por otro lado, sé que también fue gracias a Lola Herrera, de la que mi madre era gran admiradora, porque si fuimos al teatro ese día fue para verla a ella. Recuerdo que cuando acabó la función yo sentí en mi cuerpo una emoción que nunca había vivido. Me giré para mirar a mi madre y justo en ese momento se estaba secando las lágrimas. Me quedé muy impresionada. Luego me giré y vi al público también emocionado ponerse en pie... Y ahí fue cuando me di cuenta de que lo que había vivido era algo muy especial y no era algo solo mío. Esa obra nos había removido a todos y fue algo mágico. Así que mi pasión surge gracias a mi madre y al talento de Lola Herrera.

Mª R: El teatro era mi pasión desde muy niña, y de hecho soñaba con algún día ser yo la protagonista de esas historias. Recuerdo haber tenido siempre ese interés por el teatro. Y, como decía, yo quería haber estudiado interpretación, pero en aquella época estaba muy mal visto, te podían ver incluso como una puta, así de claro. Así que mis padres no me dejaron y lo acepté. Estaba muy mal considerado.

Como mujer, ¿Qué quiere decir para ti venir al teatro? ¿Qué te aporta? 

SB:  El teatro me aporta paz. Es terapia. Es mi zona de conexión espiritual con la mujer de mi vida, mi madre. Allí sé que estoy a salvo del ruido del mundo y que durante un rato nadie va a perturbar mi calma.

Ya depende de la obra, me rio más o me da por llorar, reconecto con historias internas que quizás inconscientemente tenía tapadas o abro mi mente a nuevas formas de entender la vida. Sé que da igual como haya empezado mi día, porque si lo acabo en el teatro, acabará mejor de lo que empezó porque ahí me liberaré, ya sea llorando o riendo.

Mª R: El teatro para mi es arte, consigue transportarme al mundo que el actor interpreta y me libera muchísimo, al menos ese tiempo que estoy allí concentrada y metida en esa historia. Para mí es totalmente liberador.

"El teatro me aporta paz. Es terapia. Es mi zona de conexión espiritual con la mujer de mi vida, mi madre. Allí sé que estoy a salvo del ruido del mundo y que durante un rato nadie va a perturbar mi calma". Sara Bandrés

¿Crees que el teatro tiene algún poder especial para lograr cambios en nuestra sociedad?

SB: Creo que es imprescindible para cambiar la sociedad. El poder transformador que tiene el teatro y la cultura en la sociedad es vital. El teatro te muestra realidades que de otro modo no se conocerían. Y sé que el cine también cuenta historias, pero la sensación de verlo en directo es inexplicable porque en el patio de butacas se crea una comunión real entre artistas y espectadores que jamás va a repetirse. Ese instante es único y puede marcarte para toda tu vida.

El teatro te abre la mente, te hace reír, te hace desconectar, te hace empatizar con personajes que quizás en tu vida real ni siquiera te pararías a escuchar, te transforma y remueve por dentro.  El teatro lleva con nosotras desde los griegos y a pesar de todos los años y de todas las crisis, siempre se ha mantenido en pie, y si eso sucede, es por algo. Es porque es necesario. Es porque el arte es necesario para el alma y para abrir la mente.

Mª R: Sí, creo que el teatro sería una buena herramienta para cambiar la sociedad. Pero para eso también necesitaríamos que la gente valorara más la interpretación y fuese más al teatro. Creo que todavía hay mucha gente que no lo valora, cuando le podría hacer mucho bien. Y, por supuesto, psicológicamente considero que el teatro es una muy buena terapia para muchas cosas.

Si la gente vive de espaldas al teatro, se está perdiendo la posibilidad de acceder a discursos como ese en el que aprendes a ser mejor persona, a empatizar.

¿Piensas que se ha avanzado entre la igualdad entre mujeres y hombres?

SB: Creo que hemos avanzado y el mundo está concienciándose más, pero queda mucho camino por hacer. Todavía nos encontramos con muchas trabas en cualquiera de los sectores y se nos exige más a una mujer que a un hombre a la hora de realizar un trabajo o pedir un salario equitativo por realizar la misma función. Yo misma he vivido situaciones en las que hasta que no ha venido un compañero hombre a verificar lo que estaba diciendo, no me han creído. Y eso no está bien y no es justo.

No tiene ningún sentido que las historias en el cine, teatro o televisión las cuenten mayoritariamente los hombres o que no haya papeles para mujeres pasada cierta edad. No tiene sentido que no se patrocine igual o que los medios de comunicación no le dediquen el mismo tiempo a las deportistas mujeres que a los hombres cuando ellas también compiten al máximo nivel y realizan un esfuerzo digno de admirar.

Creo que la sociedad cada vez es más consciente pero todavía queda mucho camino por delante en todas las áreas y en todos los aspectos sociales. En la conciliación familiar, en que se respete el ser madre o no, el que no se nos etiquete, que no se nos exija la perfección ni un nivel superior al de los hombres. Hay mucho camino pero por suerte, cada vez hay más concienciación y más voces.

Mª R: Se ha avanzado bastante, pero creo que aún queda tiempo para seguir dando pasos en la misma dirección, para que nos valoren. Hace muchos años vi una obra que me pareció un grito para que supiesen que estamos aquí, que somos igual de válidas y tenemos voz. Me pareció muy buena.

De hecho, recuerdo una actuación, (aunque lamentablemente no recuerdo el título de esta obra), que la interpretaba Elisa Ramírez, grandísima actriz. La obra la recuerdo perfectamente porque hablaba de la típica mujer ama de casa con tres hijos, con el marido trabajando en un banco todo el día fuera de casa. La mujer siempre de cara a la cocina, con el delantal y siempre dispuesta para todos. Hasta que llega un día que el amigo de un hijo se encapricha con ella y, aunque al principio no quiere, él le hace entender que tiene que hacer su vida.


"El teatro te abre la mente, te hace reír, te hace desconectar, te hace empatizar con personajes que quizás en tu vida real ni siquiera te pararías a escuchar, te transforma y remueve por dentro". Sara Bandrés

A lo largo de la historia, ¿Piensas que las mujeres han tenido la misma importancia que los hombres en las representaciones teatrales

SB:  Sí que pienso que la mujer en el teatro tiene una relevancia que quizás no tiene en otras artes, pero no sé si es igual que la del hombre. Sí que creo que aquí, quizás se le pone más en alza, aunque no lo sé con certeza, y que hay menos trabas por ser mujer y se nos valora mucho más.

No manejo cifras y por supuesto, no sé muchas de las cosas que hay detrás, pero como espectadora estoy muy feliz al ver que las mujeres son las que consiguen llenos absolutos en los teatros, ya sea desde el montaje más dramático o a través de la comedia. Solo hay que pensar en Lola Herrera, Concha Velasco, Carmen Machi, Blanca Portillo o las cómicas de nuestro país. Ellas a través de sus diferentes trabajos no han parado de llenar los teatros a lo largo de estos años. Además, a nivel personal, si me pongo a pensar, la mayoría de las obras que más me han impactado, han sido protagonizada por mujeres: Juana Acosta recientemente y su papel en 'El Perdón' es algo increíble o Inma Cuesta en 'Ay Carmela!' me dejó hipnotizada o Malena Alterio, Inma Cuevas, Pilar Gómez, Diana Palazón... la lista es infinita.

Mª R: No, para nada. 

¿Se te ocurre alguna obra teatral que ponga en valor los derechos de las mujeres y la igualdad de género? 

SB: Así como tal no. Pero sí me gustaría nombrar un montaje que he tenido la suerte de ver y que hace por denunciar la situación real de muchas mujeres contándola desde sus testimonios reales. Se trata de 'Prostitución' dirigida por Andrés Lima y con Carmen Machi, Nathalie Poza y Carolina Yuste. Creo que esta obra es sobresaliente, imprescindible de ver para todo el mundo, con tres de las mejores actrices de nuestro país y que es un claro ejemplo de lo necesario que es el teatro en nuestra sociedad.

Mª R: Sí, la obra que os comentaba antes protagonizada por Elisa Ramírez es un buen ejemplo. Creo que esta obra refleja muy bien el tema de los derechos de la mujer porque habla de la liberación de la mujer. Al final ella reúne a los hijos y al marido y les dice: hasta aquí he llegado, me voy a vivir, que no he vivido hasta ahora. Recuerdo que cuando terminó esa escena se levantó todo el teatro a aplaudirla, sobre todo las mujeres.

"Hay quien todavía pone en duda la capacidad de la mujer para cualquier trabajo." María Ángeles Ruiz

¿Nos podrías nombrar alguna mujer que te haya inspirado a lo largo de tu vida?

SB:  La mujer que siempre me inspira y me hace ser quien soy es mi madre. Ella ya no está conmigo físicamente, pero sé que sigue a mi lado cogiéndome de la mano y guiándome por el camino correcto. Ella era fuerte como una vikinga y me enseñó a enfrentarme a los golpes que da la vida. Ella era una luchadora nata y nunca se rindió. Ella me inspira a ser mejor, a confiar en la bondad de las personas, a no tener rencor dentro, a seguir nadando aunque las fuerzas fallen, a ser generosa. Ella era un ser de luz que hacía del mundo un lugar mejor y cuando me pierdo o me fallan las fuerzas, pienso en qué haría ella y continúo. Ella es la mujer de mi vida y quien más me inspira a ser mejor persona. Soy quien que soy, gracias a ella.

Mª R: Ha habido muchas heroínas que han marcado el camino y que merecen nuestro aplauso por su gran trabajo. Pero si tengo que nombrar a una persona que me haya marcado, esa sería mi madre, que luchó y demostró su capacidad para ser una gran madre mientras trabajaba. 

¿Qué rol crees que ocupan las mujeres actualmente en el teatro? ¿Crees que se ha evolucionado con respecto a cuándo comenzaste a ser espectadora?

SB: Pienso que las mujeres son el eje principal de la cultura y del teatro en estos momentos.  Y creo que si coges cualquier programa de mano o dossier verás casi siempre, mujeres conformando el equipo, artístico o técnico porque aparte de lo que hemos ido hablando, detrás de productoras teatrales increíbles y vitales para el teatro hay mujeres sacando adelante proyectos como productoras, hay jefas de prensa, hay regidoras, escenógrafas, técnicas, jefas de sala, directoras de comunicación, representantes, directoras, dramaturgas...

No sé si se ha evolucionado desde que yo empecé a acudir al teatro, porque por desgracia, antes no era tan consciente de ello. Pero sí sé que ahora, veo presencia femenina delante y detrás de las tablas y eso me da paz y confianza en que siga creciendo cada vez más porque es muy necesario y no debe pararse aquí.

Mª R: Si, las mujeres han avanzado mucho en cualquier papel que quieran, como actrices o en cualquier otra profesión dentro del teatro, pero es increíble cómo hay quien todavía pone en duda la capacidad de la mujer para cualquier trabajo. Está más que demostrado que somos igual o mejor que los hombres para desempeñarlos.

Así que, aunque hemos dado un gran paso, todavía queda mucho por hacer. 

Tú, como mujer y espectadora habitual de teatro, ¿Qué consejo le darías a una mujer que quiere comenzar a adentrarse en el mundo de las artes escénicas? 

SB: Sinceramente, no me gusta mucho dar consejos. Pero cuando alguna de mis amigas me pregunta qué obra ir a ver, siempre le digo que depende mucho de su estado de ánimo y de sí es su primera experiencia teatral. Creo que ese primer encuentro con el teatro es de las cosas más mágicas que hay y lo que puede marcar que te adentres en él o no, por eso igual hay que empezar con montajes divertidos o más fluidos si tu estado de ánimo está regular o dejarte acompañar por alguien que te conozca y haya visto la obra. No sé, es una pregunta que me da bastante respeto contestar pero sí que recomiendo a todo el mundo que pise un teatro al menos una vez en su vida, y si esa primera vez no cuaja, que le de una segunda oportunidad y vuelva.